Inteligencia Artificial- La entrada a un nuevo orden
Un
ser capaz de pensar, decidir, soñar, crear y sentir. Un ser como nosotros, pero
no humano. Inteligente pero de forma artificial
La
creación de las computadoras nos permitió soñar por primera vez con las
múltiples posibilidades de estos nuevos artefactos, la imaginación nos llevó
obviamente a considerar que ahora seriamos capaces de crear seres pensantes,
similares a nosotros. Los primeros en imaginar estas posibilidades pensaron en
seres metálicos hechos a imagen y semejanza nuestra: Robots, palabra acuñada
por primera vez por el escritor checo Karel Capek, en 1921. Con el paso del
tiempo esta concepción fue cambiando hasta presentarnos en el cine a personajes
como Hal, la inteligencia artificial del aclamado film de Kubrik: 2001 Odisea
en el espacio.
Muchos
de nosotros estamos familiarizados con los términos Hardware y software. Siendo
el primero la parte física de un ordenador y la segunda los componentes
virtuales que nos permiten interactuar con él. En cierta forma el cerebro
aunque primitivo de nuestros computadores.
En
los años 40´s surgieron los primeros ordenadores, gracias a ello ahora somos
capaces de lograr cosas que no imaginábamos pues las computadoras realizan
cálculos en cuestión de milésimas de segundo, sin embargo nosotros somos
inteligentes, es decir que quizá no podamos hacer lo que ellas logran en cuestión
de tiempo, pero si somos capaces de razonar.
Aunque
como platicábamos anteriormente en un inicio nos remitimos inmediatamente a la
parte de Hardware al pensar en Robots con forma humana para tratar de entender
la IA (Inteligencia Artificial) con el paso del tiempo hemos comprendido que
radica en la parte virtual la parte fundamental de lo que nos permitirá crear a
este ser. Veamos la película HER, estrenada hace un par de años en la que un
aparato de IA con voz, adquiere conciencia y se transforma, sin necesidad de un
cuerpo físico.
Aún
nos falta para completar ese proceso, pero las posibilidades son ilimitadas, ya
contamos con artefactos denominados inteligentes como edificios, autos,
dispositivos móviles, que si bien no piensan contienen una programación tan
avanzada que nos permiten vislumbrar lo que viene
Sin
embargo las maquinas aun no pueden pensar:
•
Las máquinas carecen de mecanismos intuitivos y se basan sólo en el método
automático de prueba y error; por ello, no tienen la capacidad de reaccionar
ante situaciones inesperadas ni la posibilidad de generalizar acontecimientos
distintos.
•
Las máquinas carecen de creatividad, aspecto hasta ahora totalmente humano. En
las máquinas no existe una interrelación creativa, y los cambios de contexto no
implican una modificación sustancial entre sus circuitos y programas; el medio
circundante no modifica estructuralmente sus funciones.
•
La mente humana está provista de valores producto de la interrelación social;
al carecer de aquéllos, las máquinas no piensan
El
autor del texto base para este breve ensayo termina su disertación con la misma
incertidumbre con la que nosotros vivimos: ¿será posible? y de ser así ¿Qué
será de nosotros?
Elegí
este tema porque me provoca siempre a reflexionar sobre las posibilidades que
pueden venir, un interés previo por el cine y en particular por cintas como
Metrópolis, 2001 odisea en el espacio, Inteligencia Artificial y Her, las
cuales recomiendo ampliamente me dieron pie al tema e incluso a este breve
texto.
Muchos
compañeros tomaron un lado muy positivo sobre el tema lo cual es muy común, a
mí en lo personal me parece una cuestión
que merece una reflexión más profunda, pues inteligencia no es sinónimo de
sentimientos. Una máquina que piense podría ser francamente peligrosa.
Los
invito a ver estas películas.
Odisea
en el espacio
Her
Metrópolis